Día 8:
Desayuno. Salida por carretera, a través de un paisaje escénico, hacia el Santuario de Elefantes, donde gozan de una excelente calidad de vida y de los cuidados necesarios. Son remansos de paz que, a su vez, perpetúan la especie. Conoceremos sus particulares historias y tendremos la oportunidad de alimentarles, bajo la supervisión del personal. Almuerzo en restaurante local. Completaremos la visita en una plantación de orquídeas, cultivo muy introducido en la cultura tailandesa. En su interior hay un mariposario con insólitas especies. También nos acercaremos a los centros de producción de artesanía de Sankampaeng y Borsang, para disfrutar del arte en madera, sombrillas hechas a mano, sedas tejidas, plateros y joyeros, cerámicas, lacados y un sinfín de obras artesanales. No olvidemos que la artesanía de calidad requiere de tiempo, talento y creatividad. Regreso al hotel. Por la tarde, degustaremos una cena Kantoke típica, amenizada con antiguas danzas del norte de Tailandia. Alojamiento.